Aunque es muy segura, hay situaciones específicas donde la hipnosis requiere precaución o no es la primera opción:
- Psicosis Activa No Controlada: En personas con esquizofrenia, trastorno bipolar en fase maníaca o delirios activos, la hipnosis podría confundir más o empeorar los síntomas. Se necesita estabilidad y supervisión psiquiátrica estricta. 🧠⚠️
- Intoxicación Aguda (Drogas/Alcohol): La persona no está en condiciones de concentrarse ni colaborar adecuadamente. 🍺💊🚫
- Resistencia o Miedo Extremo: Si alguien tiene un pánico atroz a la hipnosis o se niega rotundamente, forzarlo sería contraproducente y poco ético. Primero hay que educar y generar confianza. 😨➡️🤝
- Ciertas Condiciones Neurológicas Graves (con cautela): Aunque no es una contraindicación absoluta, en epilepsia o daño cerebral severo, el terapeuta debe ser experto y adaptar las técnicas para evitar sobreestimulación. 🧠❓
- Cuando Sustituye un Tratamiento Médico Necesario: ¡JAMÁS! La hipnosis es un complemento. Si tienes una condición médica seria, debes seguir tu tratamiento principal. La hipnosis puede apoyar, no reemplazar. 🧑⚕️➕🧘♀️
En resumen: Salvo casos muy específicos de salud mental grave no estabilizada, la hipnosis es apta para la gran mayoría. Un terapeuta responsable siempre evaluará tu caso individualmente y, si considera que no es lo adecuado para ti, te lo dirá honestamente y te orientará hacia otras opciones. ¡Tu seguridad es lo primero! ✅
